Demostrar que existe una nueva forma de hacer negocios, sin “mañas” ni prácticas indebidas para crecer, con empresas comprometidas en resolver grandes desafíos de la sociedad, sin que sea exclusivo de los gobiernos, es el pilar fundamental del Movimiento B (bienestar), que ya tiene adheridas a unas 50.000 empresas en el mundo.
Uno de sus fundadores y promotores, Bart Houlahan, estuvo ayer en Medellín para explicar la manera en que los negocios deben contribuir a frenar el cambio climático, a fomentar la sostenibilidad, a generar bienestar social y sobre todo, a educar a los consumidores inteligentes.
Invitado por Bancolombia para asistir a la premiación de sus mejores proveedores (ver Para saber más), Houlahan dio puntadas sobre esta iniciativa que promueve con su propio emprendimiento llamado B Lab y que en América Latina es representado por la organización Sistema B.
Una de las novedades de su modelo, es que no solo certifica empresas en buenas prácticas, sino que ofrece de manera gratuita una herramienta que mide el desempeño empresarial, respecto a elementos del bienestar colectivo.
¿Cómo empezó este movimiento empresarial?
“Inicié como emprendedor de una compañía de productos deportivos. Fueron 11 años de aprendizaje en la manera de hacer negocios. Me di cuenta que la sociedad necesitaba nuevos modelos que ayudaran a cambiar las cosas, porque no se trata de vender y vender sin importar la forma de hacerlo. Los negocios representan tres cuartas partes de la economía mundial y por eso tenemos que usar esto para el cambio”.
¿El Movimiento B es una corriente de responsabilidad social?
“No. La B de bienestar es la razón para mover la comunidad de negocios hacia un mundo diferente. Estamos usando métricas que nos permiten analizar a las compañías frente a la manera responsable de hacer negocios. Con prácticas transparentes, con mejores formas de relacionarse con sus públicos objetivos. Las mismas empresas son quienes nos buscan para revisarlas”.
¿Cómo miden ustedes que una empresa sea “B”?
“La certificación tiene dos requisitos: primero, la misma empresa debe tomar la iniciativa para después pasar una evaluación que mide su relacionamiento con empleados, consumidores, proveedores y la sociedad. Es bastante retador este examen, que tiene un puntaje máximo de 200. El segundo requisito, tiene que ver con el cambio de mentalidad de los líderes de las empresas. Asegurándonos que aplicarán el modelo”.
¿Cuál es su definición de una empresa exitosa?
“Redefinimos este concepto y son aquellas que son las mejores para el mundo y no las que más facturan del mundo. Hay una gran diferencia”.
¿Es más filantrópico este nuevo concepto?
“No, porque estamos cambiando el rol de los negocios en la sociedad. Es algo real, medible, que impacta los resultados de las empresas. Todo parte de unos buenos líderes que promuevan este concepto”.
¿Cuántas empresas en Colombia están certificadas?
“En al ámbito global son 1.700 empresas certificadas, distribuidas en 51 países. En Colombia hay 41, de ellas, sobresalen Crepes & Wafles y Ecoflora”.
¿Un empresario cómo accede a esta herramienta?
“Puede ingresar a www.sistemab.org y allí cualquier empresa puede medir su desempeño frente al bienestar, con variables que le permiten determinar si está trabajando de manera adecuada o no. Es una evaluación gratuita y se accede en línea”.
¿Cuál es la diferencia entre el sistema B y otros modelos sostenibles?
“Hay muchas diferencias. Sabemos que existen varias certificaciones internacionales en lo laboral o ambiental. Pero este movimiento se orienta es en los negocios como tal, en los consumidores y reguladores de la industria, de modo que haya más conciencia al elegir una marca”.