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La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) emitió medidas cautelares para las familias indígenas del pueblo Emberá Eyábida, que están registradas en los resguardos de Río Murindó y Río Chagerdó, al considerar que estas se encuentran en situación de riesgo.
Dice la CIDH que esta población es objeto de “actos de violencia, además de amenazas, hostigamiento, desplazamientos, y asesinatos por la presencia de grupos armados en sus territorios”.
A juicio de la Comisión, que está adscrita al sistema de la Organización de Estados Americanos (OEA), si bien el Estado viene desarrollando acciones de seguridad con el despliegue de unidades de Policía y Ejército, no se ha evidenciado el cese de la violencia entre los grupos armados, lo que afecta directamente a los indígenas.
La CIDH solicitó al Estado adoptar medidas para salvaguardar la vida e integridad de quienes viven en estos pueblos, concertando las determinaciones que tome con quienes están directamente afectados por el conflicto. Además, Colombia deberá informar qué acciones adopta para investigar los hechos de violencia que se vienen registrando en el territorio.
Asimismo, apuntó que “el otorgamiento de la medida cautelar y su adopción por el Estado no constituyen un prejuzgamiento a una petición que eventualmente pueda ser interpuesta ante el Sistema Interamericano sobre una posible violación de los derechos protegidos en los instrumentos aplicables”.
La presencia de grupos armados al margen de la ley en los territorios indígenas es un problema que ha afectado durante varios años a estas comunidades que, incluso, han terminado sitiadas por los enfrentamientos entre grupos como las Autodefensas Gaitanistas y el ELN.