Este miércoles, desde las 2:00 p.m., el estadio de San Mamés en Bilbao será testigo de un enfrentamiento entre dos históricos de la Premier League: Manchester United y Tottenham Hotspur.
Ambos equipos llegan a esta final de la UEFA Europa League con trayectorias contrastantes en el torneo, pero con un objetivo común, levantar el trofeo y asegurar su pase a la próxima Champions League.
El Manchester United ha participado en la Europa League (antes, la Copa UEFA) en múltiples ocasiones, pero su éxito se concentra en la edición 2016-17, cuando bajo el mando de José Mourinho derrotaron 2-0 al Ajax en la final disputada en Estocolmo.
Tottenham: dos títulos y una larga espera
Por su parte, el Tottenham tiene un legado más antiguo pero igual de destacado en esta competición. Los Spurs fueron los primeros campeones de la Copa UEFA (actual Europa League) en 1972, al vencer a otro equipo inglés, el Wolverhampton, en una final a doble partido (3-2 global).
Su segundo título llegó en 1984, cuando superaron al Anderlecht belga en los penaltis (4-3) tras un empate 2-2 en el marcador global.
Desde entonces, el club no ha vuelto a ganar un trofeo continental, aunque estuvo cerca en la Champions League 2018-19 (perdiendo la final ante el Liverpool). Esta final de Europa League representa una oportunidad dorada para romper una sequía de 17 años sin títulos.
Ambos equipos llegan a Bilbao tras temporadas irregulares en la Premier League (United, puesto 16° y Tottenham, casilla 17°), pero con la motivación extra de que el ganador obtendrá un boleto directo a la Champions League 2025-26.