El Deportivo Independiente Medellín expresó su “clara inconformidad” por la sanción a Andrés Ricaurte, que fue informada por el Comité Disciplinario de la Dimayor a menos de 24 horas del clásico entre Medellín y Nacional.
El ‘poderoso’ recibió la notificación de la suspensión este viernes pasadas las 9:00 p.m. por lo que presentaron un recurso de reposición contra la resolución de la sanción.
“La institución considera que no se actuó de manera procedente por parte de la Dimayor, violando el debido proceso y el derecho de defensa del jugador Andrés Ricaurte no dando oportunidad a la presentación de las pruebas que demuestran su inocencia”, detallaron en un comunicado.
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Además, agregaron que el “hecho perjudica a nuestro Club, a la hinchada y a la integridad de nuestro mediocampista, a quien respaldamos”.
El cuadro rojo está liderando una etiqueta en pro del 10 en redes sociales:
El DIM exige que hasta que “se garantice la adopción de un debido proceso sancionatorio” y haya “una decisión en firme” “se deje sin efecto” o “se suspenda la sanción”.
¿Por qué lo suspendieron?
Según la Dimayor la suspensión se dio por “contribuir en un error de juicio y en consecuencia hacer adoptar una decisión incorrecta a un oficial de partido en el encuentro disputado por la 9ª fecha de la Liga Aguila I 2019 contra Independiente Santafe”.
Estos son argumentos del DIM para poner una reposición a la sanción:
1. La notificación hecha por la Dimayor al Club y al jugador para la presentación de descargos se hizo de manera irregular al no utilizarse los canales oficiales inscritos por el Club en Dimayor y Cámara de Comercio para tales fines por lo tanto, no pudieron realizar una defensa técnica adecuada.
2. La resolución con la imposición de la sanción fue emitida el viernes, pasadas las 9:00 de la noche, generando así una imposibilidad para el Club y para el jugador de rebatir su contenido.
3. El texto de la resolución es incongruente y no cumple con los requisitos mínimos del ordenamiento jurídico colombiano en materia sancionatoria y deportiva violando así de manera directa y flagrante el derecho fundamental a una defensa y al debido proceso.