Javi Martínez, al que Josep Guardiola sólo otorgó unos pocos minutos de juego, dio el empate al Bayern de Múnich en el último suspiro de la prórroga y permitió a los bávaros vencer en la tanda de penaltis.
Cuando el Chelsea se frotaba las manos tras lo que parecía una trabajada victoria en la prórroga, apareció el jugador de español y echó todo por tierra. Al margen del resultado, el Chelsea de Jose Mourinho y el Bayern de Josep Guardiola escenificaron una final para el recuerdo, llena de detalles tácticos, y donde se ve la mano de Pep, si bien el equipo perdió algo de mordiente durante muchos tramos del encuentro.
Por parte del Chelsea marcaron el español Fernando Torres (8’) y el belga Eden Hazard (93’), mientras que por el Bayern de Múnich, el francés Frank Ribery (47’) y el español Javi Martínez, que forzó la rueda de penaltis con un gol en el minuto 121.
Una tanda de penaltis en la que se impuso el conjunto alemán, ganador de la última edición de la Liga de Campeones, tras la parada del portero Manuel Neuer, que atajó el quinto y último lanzamiento del Chelsea, obra del delantero belga Romelu Lukaku.
Y así, con pizarra 5-4 en los penales, el Bayern de Múnich, campeón de la Champions, conquistó su primer título de la Supercopa de Europa.
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