Un avión Boeing 737-400 de la empresa British Airways que se disponía a aterrizar el pasado lunes en Port Elizabeth, Sudáfrica, perdió el tren de aterrizaje y provocó pánico entre el centenar de personas que iban a bordo. Ninguno de los 94 pasajeros ni los seis miembros de la tripulación resultó herido.
Según afirma el diario The Guardian, el vuelo BA6234, operado por Comair que despegó en Port Elizabeth, Ciudad del Cabo sufrió un accidente al entrar en la pista por uno de sus trenes de aterrizaje.
Erik Venter, consejero delegado de la compañía de Comair, explicó que “el avión acababa de entrar en pista, en la rutinaria operación de aterrizaje, cuando la tripulación notó una vibración inusual y a continuación colapsó el tren de aterrizaje por su lado izquierdo”.
Venter aseguró que el pánico fue “mayúsculo” en la aeronave y en el aeropuerto que pensaron que podía ocurrir una catástrofe. Uno de los pasajeros aseguró que los pilotos hicieron “un gran trabajo” al reaccionar “con mucha rapidez”.