Diecisiete cabecillas del crimen organizado, en representación de más de 200 combos delincuenciales del Valle de Aburrá, se sentarán a la mesa con el Gobierno para hablar de paz.
En un evento realizado en la mañana de este viernes, en la cárcel de máxima seguridad de Itagüí, las partes oficializaron el inicio de la fase pública de las conversaciones, luego de 10 meses de acercamientos exploratorios. Esta es la reseña del caso elaborada por El Colombiano con apoyo de Revelaciones del Bajo Mundo.
Estos son algunos de los jefes de las bandas que asistieron al evento, de izquierda a derecha: alias “Pocho”, “Vallejo”, “Iván el Barbado”, “Carlos Pesebre”, “Grande Pa” y “Tom”. Foto de Manuel Saldarriaga.
Con la conformación de una delegación oficial, el Gobierno Nacional avanza a la fase pública de las conversaciones con las bandas de crimen organizado del Valle de Aburrá, cuya meta final es el desarme de por lo menos 14.000 integrantes.
Así lo informó el alto Comisionado para la Paz, Danilo Rueda, en una entrevista exclusiva con El Colombiano, en la cual estuvieron dos de las personas seleccionadas para integrar dicha comisión: Isabel Zuleta, senadora del Pacto Histórico y activista ambiental; y Jorge Mejía Martínez, exconcejal y exsecretario de Gobierno de Antioquia y Medellín.
Esta es la reseña del caso elaborada por El Colombiano, con apoyo de Revelaciones del Bajo Mundo.
El alto Comisionado para la Paz, Danilo Rueda, en el centro. A los lados, los futuros miembros de la delegación del Gobierno para la paz urbana en Medellín, Isabel Zuleta y Jorge Mejía Martínez. Foto de Jaime Pérez.
Mauricio Alberto González Sepúlveda, alias “el Ronco”, uno de los jefes históricos del crimen organizado en el Valle de Aburrá, se entregó de forma voluntaria a las autoridades para responder por una sentencia judicial.
El cabecilla de la banda “La Unión” de Itagüí, con múltiples procesos penales en su prontuario, estaba libre desde 2017, cuando salió de la cárcel por vencimiento de términos. Su nueva detención llega justo cuando actúa como representante de “la Oficina” en los acercamientos de paz con el Gobierno Nacional.
Mauricio González, alias “el Ronco”, jefe de la banda “la Unión” y exmiembro de las Autodefensas paramilitares. Foto de la Policía.
Una máquina de hacer dinero untado de sangre y horror, que lleva cuatro décadas adaptándose a cada época de la criminalidad en Colombia. Esa es “la Oficina”, la organización mafiosa con la que el Gobierno Nacional espera concretar un acuerdo de acogimiento a la justicia.
Tal cual han venido informando El Colombiano y Revelaciones del Bajo Mundo, los acercamientos comenzaron en plena campaña presidencial de Gustavo Petro, cuando envió delegados a las cárceles y a las comunas de Medellín para proponerles a los integrantes de este grupo su proyecto de “paz total”. La mayoría de cabecillas respaldó la idea, anhelando recibir beneficios jurídicos, y de paso le dieron un empujón electoral definitivo al entonces candidato.
Escena de la masacre de nueve personas en una finca de la vereda El Salado, en Envigado, el 31 de diciembre de 2012. El crimen está impune. Foto de archivo.
Detrás de los llamados de paz que están haciendo los grupos de crimen organizado con la llegada de Gustavo Petro al poder, hay un tejido de relaciones, fracasos y conspiraciones que se ha venido armando durante los últimos ocho años.
En ese entramado están involucrados los excomandantes de las Auc, los líderes encarcelados de “la Oficina” y el Clan del Golfo, tres organizaciones que compartieron en algún momento de su existencia la doctrina paramilitar y los negocios de narcotráfico. Junto a ellos, actúa una serie de corporaciones de DD.HH. y abogados que tramitan los acercamientos con el Estado.
Este es el informe de El Colombiano sobre esta situación, realizado con el apoyo de Revelaciones del Bajo Mundo.
José Leonardo Muñoz (“Douglas”) es uno de los líderes de “la Oficina” que estaría dando directrices frente a los acercamientos con el Gobierno. En esta imagen, el momento de su captura en 2009, junto a su lugarteniente alias “el Compa” (derecha). Foto de archivo.