El desorden público orquestado por las bandas criminales de Bello desde hace cinco meses, caracterizado por homicidios y balaceras frecuentes, le costó la libertad a tres cabecillas de la mafia que solían actuar a la sombra.
Dos homicidios, una violenta riña en la cárcel y un tiroteo nocturno son las más recientes acciones de una estructura criminal que se ha convertido en un dolor de cabeza para las autoridades de Medellín y los habitantes de las comunas de San Javier y La América: “la Agonía”.
Este es un informe de El Colombiano sobre esa organización delictiva, elaborado con apoyo de Revelaciones del Bajo Mundo.
Uno de los cabecillas históricos del crimen organizado de Bello, quien al parecer estaría involucrado en el incremento de homicidios de este año en la localidad, fue excluido del cartel de los delincuentes más buscados elaborado por las autoridades.
Se trata de un ciudadano apodado “el Montañero”, jefe de la banda “el Mesa”. De acuerdo con la Fiscalía, por medio de contactos corruptos en instituciones públicas ha logrado cambiar de identidad en varias oportunidades, por lo que en los registros judiciales aparece con tres nombres: Luis Rodrigo Rodríguez Rodríguez, Juan Camilo Hernández Berrío y Gustavo Adolfo Pérez Peña.
Esta es la reseña del caso publicada por El Colombiano, con apoyo de Revelaciones del Bajo Mundo.
Nueve bandas del Valle de Aburrá vienen extendiendo sus redes en pueblos del departamento de Antioquia en los últimos cinco años, logrando incrementar su poder y rentas ilegales lejos de sus barrios de origen.
Esta es una investigación elaborada por El Colombiano, con apoyo de Revelaciones del Bajo Mundo, que presenta cuáles son los nuevos escenarios en el juego del crimen organizado regional.
Una fractura en la estructura interna de la organización criminal “Pachelly” está originando el deterioro del orden público en el municipio de Bello.
En las últimas dos semanas, los habitantes de las comunas Niquía y Altos de Niquía, en el norte de esa localidad, han padecido por balaceras entre delincuentes, agravadas por la participación de otros combos y tácticas de terrorismo por las redes sociales.
Una división en la banda “la Terraza”, al parecer liderada por alias “Tréllez”, ha provocado ajustes internos y múltiples asesinatos que afectaron la seguridad en tres municipios del Valle de Aburrá.
Los detalles son narrados en esta investigación periodística de El Colombiano, que Revelaciones del Bajo Mundo reproduce por considerarla de interés para sus lectores y comentaristas.
En la última semana, los cementerios del Valle de Aburrá fabricaron 33 nuevas lápidas para las víctimas de muertes violentas, lo que implica que la región “más desarrollada” de Antioquia despidió el Año Viejo con una racha de homicidios y recibió el Año Nuevo con otra igual.
De acuerdo con la estadística oficial, en la semana del jueves 27 de diciembre al jueves 3 de enero se registró un asesinato cada 6 horas en promedio.
El 2018 pasará a la historia del crimen del Valle de Aburrá como el primer año en el que no hubo un “patrón de patrones” en la calle, rigiendo a todas las bandas y dictando con mano férrea las normas del bajo mundo.
A diferencia de las décadas del 80, 90 y 2000, cuando había capos que dominaban la voluntad de los combos, la mafia actual se caracteriza por un mayor grado de autosuficiencia de sus redes, siendo las alianzas estratégicas, y no la subordinación, la principal forma de consolidación de los grupos ilegales en el área metropolitana.
Este es un análisis criminológico elaborado por El Colombiano, que Revelaciones del Bajo Mundo publica por considerarlo de interés para sus lectores.
Cuatro episodios de doble homicidio en el Valle de Aburrá, registrados en las últimas dos semanas, tienen a los investigadores quemando neuronas sobre qué dinámicas se están presentando en el bajo mundo.
Los sucesos parecen desconectados entre sí, motivados por situaciones diferentes, pero demuestran una aborrecible realidad: el sicariato sigue en pleno furor en nuestro vecindario.
Laureles, una comuna de Medellín que por mucho tiempo estuvo considerada entre las más tranquilas, se vio afectada en los últimos años por las acciones de una célula sicarial secreta, que actuaba de forma discreta y letal.
Sus crímenes quedaron al descubierto tras una operación de la Dijín y la Dirección de Fiscalías contra la Criminalidad Organizada. El caso cobró relevancia porque los mercenarios del grupo estarían implicados en una de las muertes ligadas al hurto de un botín multimillonario del Clan del Golfo.
Esta es la historia elaborada por El Colombiano, que Revelaciones del Bajo Mundo reproduce por considerarla de interés para sus lectores.
El ataque contra cuatro jóvenes en el municipio antioqueño de San Jerónimo, en el que dos murieron y dos resultaron heridos, estaría relacionado con un fallido atentado contra un cabecilla de la organización criminal “la Terraza”.
Esta es la hipótesis preliminar de las autoridades sobre el incidente acaecido el pasado domingo 16 de septiembre, en la vereda Tafetanes de la citada localidad de Occidente.
La salida de prisión de integrantes de vieja guardia del crimen organizado del Valle de Aburrá continúa. A la excarcelación de personajes como “el Patrón de Bello”, “Popeye”, “el Ronco” y “el Cebollero”, se suma la de alias “Beto”.
Esta es la reseña del caso, elaborada por El Colombiano, que despertó las alarmas en las autoridades del área metropolitana.
En una finca del municipio turístico de Tolú, en el departamento de Sucre, fue capturado Juan Carlos Castro, alias “Pichi Belén” o “Pichi Castro”, uno de los principales cabecillas de la actual generación de la estructura mafiosa “la Oficina”.
El operativo policial se realizó al mediodía de este domingo 19 de agosto, en una cabaña del sector conocido como Playas del Francés, donde desde el día anterior venía consumiendo licor con cuatro acompañantes.
¿Por qué se volvió a disparar la violencia en la comuna 13? Este reportaje periodístico, elaborado por El Colombiano con apoyo de Revelaciones del bajo mundo, expone las razones detrás del incremento en los homicidios.
Una disputa entre dos cabecillas, que otrora fueron aliados, generó una bola de nieve a la cual se adhirieron varias bandas. Y a la sombra de ellos, los capos encarcelados siguen tejiendo los hilos del reino del hampa.
Cuatro asesinatos perpetrados en los últimos meses parecen guardar relación con el asalto a un apartamento en Medellín, de donde los ladrones se llevaron un botín estimado de 20.000 millones de pesos, pertenecientes a la organización criminal Clan del Golfo o “los Urabeños”.
Aunque se cree que puede haber más víctimas en este caso, las autoridades apenas están atando los cabos. La historia quedó expuesta en una investigación periodística de El Colombiano, cuyo título original es “Un botín de la mafia deja su rastro de víctimas”. Por considerarlo de interés para sus lectores, Revelaciones del Bajo Mundo reproduce el reportaje a continuación.
Un reportaje periodístico de El Colombiano, basado en una investigación adelantada por la Dirección Antinarcóticos de la Policía, puso al descubierto una operación de narcotráfico a gran escala impulsada por la organización criminal “la Oficina”.
La estructura mafiosa envió jóvenes del Valle de Aburrá al departamento de Nariño, para pelear el territorio contra las disidencias de las Farc. Por considerar que el tema es de interés para los lectores de Revelaciones del Bajo Mundo, publicamos el reportaje, cuyo título original es La guerra que armó ‘la Oficina’ por la cocaína de Tumaco”.
“Dios lo bendiga, mi capitán”, dijo Jhon Jairo Velásquez Vásquez, alias “Popeye”, antes de darse la bendición, con las manos esposadas.
Luego se encendió el motor de la avioneta de la Policía, en la mañana del lunes 28 de mayo, y partió con el exsicario de Pablo Escobar desde el aeropuerto Olaya Herrera de Medellín hacia la ciudad de Valledupar, donde de nuevo una cárcel se convirtió en su lugar de acogida.
Una serie de asesinatos y atentados contra cabecillas, perpetrados en los últimos cinco meses, tiene a los jefes de la mafia del Valle de Aburrá durmiendo con un ojo abierto.
El caso más reciente fue el ataque contra el exconvicto Mauricio Alberto Zapata Orozco, alias “Chicho”, integrante de la banda “la Terraza”.
Una reacción delincuencial a la captura y encarcelamiento de alias “Sombra”, un cabecilla de la organización criminal “Robledo”, es una de las hipótesis que argumentan las autoridades para explicar una oleada de violencia que afecta a las comunidades de Robledo y San Javier.
Cristian Camilo Mazo Castañeda (“Sombra”), desmovilizado del bloque Héroes de Granada de las Auc, fue detenido este sábado 21 abril, cuando la Policía allanó la propiedad en la cual se escondía, en un paraje rural del municipio antioqueño de El Peñol.
Entre las decenas de organizaciones criminales que azotan el Valle de Aburrá, hay una que ha crecido de forma desmedida y silenciosa, como un tumor: la banda de “el Mesa”.
La última vez que ese nombre retumbó en la opinión pública fue el pasado 5 de marzo, cuando un grupo de sicarios motorizados asesinó a dos personas en plena vía Las Palmas, ante cientos de transeúntes y pasajeros que, en el congestionado trayecto, tuvieron que contemplar la inspección judicial a la escena.
Esta es una investigación periodística de El Colombiano, elaborada con apoyo de Revelaciones del Bajo Mundo.