Cuatro hombres murieron al ser abaleados afuera de una tienda, en el nororiente de Medellín.
El ataque fue perpetrado cuando un grupo de personas bebía licor y jugaba parqués en el exterior del pequeño establecimiento, en el barrio Versalles N°1.
Cuatro hombres murieron al ser abaleados afuera de una tienda, en el nororiente de Medellín.
El ataque fue perpetrado cuando un grupo de personas bebía licor y jugaba parqués en el exterior del pequeño establecimiento, en el barrio Versalles N°1.
Cuando Maximiliano Bonilla Orozco fue capturado, estaba en compañía de su cónyuge y su bebé recién nacido. Mientras los investigadores registraban el apartamento en Venezuela, él le decía a la mujer que no se preocupara, que el único pecado de ella era estar con él.
Una semana después de la detención (noviembre 27), alias ‘Valenciano’ continúa en la ciudad de Caracas, a la espera de la deportación hacia Estados Unidos, donde es requerido por narcotráfico.
Maximiliano Bonilla Orozco, alias ‘Valenciano’, viajaba con frecuencia a Venezuela, por donde se movía con relativa facilidad gracias a la documentación venezolana que tenía.
Hace algunos meses se instaló en la ciudad de Maracay, cercana al mar Caribe, en una urbanización de estrato medio alto llamada La Soledad, hasta donde llegaron los uniformados a capturarlo, en un operativo binacional.
El informe más reciente de Medicina Legal sobre los homicidios en Medellín, presenta una realidad contundente: en la comuna 13 es donde más menores de edad son asesinados.
La nueva víctima de ese drama es un muchacho de 15 años, desescolarizado, a quien la muerte le llegó hasta la entrada de la casa.
La forma en que la Policía presentó la reciente captura de Carlos Augusto Correa López sembró confusión en la opinión pública, pues muchos pensaron que el detenido había sido otro.
Este hombre, más conocido como ‘Pepe’, ‘Don Pepe’ o ‘Mono Pepe’, debía haber estado en la cárcel al momento de la aprehensión, pero ya hay muchos casos para demostrar que, cuando de cabecillas de la organización ‘La Oficina’ se trata, la justicia parece tener otra vara para medir.
Un atracador perdió la vida haciendo lo suyo, cuando en compañía de otro quiso robarle al conductor de un campero, en Medellín.
Los asaltantes motorizados interceptaron el vehículo en cercanías a la plaza de toros La Macarena. El parrillero de 22 años se bajó y se arrimó a la ventanilla del ciudadano, intimidándolo con un arma de fuego.
Un agente del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) fue asesinado y su cadáver abandonado dentro de un carro, en el suroccidente de Medellín.
La víctima se llamaba Gerardo Durango y se desempeñaba como escolta en el Programa de Protección a Víctimas y Testigos de la Fiscalía.
Cuando se trataba de combos delincuenciales en Medellín, la palabra de ‘Don Efra’ era respetada. Tanto así, que la mediación de este hombre fue empleada para lograr el pacto de no agresión entre bandas, que redujo el índice de homicidios durante la celebración de los Juegos Suramericanos de 2010 en la ciudad.
Y tarde o temprano, el que se mueve en ese mundo termina mal y a las 7:30 a.m. de hoy asesinaron a Efraín Maldonado Álvarez, en el barrio Buenos Aires.
El taxista Enoc Ocampo Moncada comenzó a rondar la iglesia del barrio San Bernardo desde las 7:00 a.m. de hoy, cuando se estacionó en una tienda cercana a ‘desayunar’ con licor.
Aguardó a que terminara la primera Eucaristía del día y entró en el templo, dispuesto a cometer una herejía mortal.
En las últimas dos semanas se han presentado tres casos de doble homicidio que involucran taxis, en el Área Metropolitana.
El hecho más reciente sucedió en la madrugada de hoy, en el municipio de La Estrella, cuando los dos ocupantes del automóvil de servicio público esperaban a una mujer en las afueras de una urbanización residencial.
Un automóvil Mazda 323 con el vidrio trasero perforado, la sangre saliendo por las coyunturas de las puertas, abandonado en una carretera polvorienta de Marinilla, un municipio del oriente antioqueño.
Una imagen que hacía presagiar lo peor para los campesinos de la zona, tal cual lo confirmó después la Policía. En la silla de atrás yacían tres cadáveres y en la maleta del carro otros dos, con heridas de bala y arma blanca. Un crimen brutal.
El Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) capturó en la mañana de hoy a un fiscal y un defensor público, hecho que se suma a las detenciones de otros seis funcionarios judiciales en el último mes y medio.
Los aprehendidos fueron Ílvar Alfonso Delgado Ruiz, fiscal 220 Seccional del municipio de Bello, y el defensor Juan Esteban Benjumea Puerta.
Un bombero voluntario del municipio de Girardota, y también empleado de una fábrica de textiles, adquirió un revólver hace dos semanas y en la mañana de ayer reveló su oscuro propósito.
A las 5:00 a.m., en la casa familiar de la vereda El Barro, buscó a su esposa y le propinó dos balazos mortales, antes de salir corriendo.
Cuando en Colombia pensamos en actos terroristas, en general suponemos que se trata de las atrocidades cometidas por la guerrilla o los paramilitares, que son los grupos armados ilegales reconocidos internacionalmente como ‘terroristas’.
Pero lo que hicieron los sicarios en el barrio San Fernando, del municipio de Itagüí, y en el barrio Juan XXIII de Medellín, se acerca mucho a esa expresión.
Uno de los combos delincuenciales más peligrosos de la comuna de Manrique, en el nororiente de Medellín, está siendo perseguido con intensidad por las autoridades.
Se trata de la banda de ‘Motor’, cuyas actividades incluyen el sicariato, cobro de extorsiones y hurto a vehículos y personas.
En el último mes, los homicidios en Medellín y el Área Metropolitana han estado como el clima: unos días llueve torrencialmente, y a los siguientes el Sol es endemoniado, unos días apenas hay un asesinato, y al otro la cifra sube a siete.
¿Qué ha cambiado en el mapa criminal de la urbe? Estuve conversando con varios investigadores y analistas de la Policía Judicial y de Inteligencia, así como con gente de la Alcaldía, y a continuación quiero compartir con ustedes varias de las teorías que hay para explicar la situación actual de violencia.
Las organizaciones criminales ‘Pachelly’, ‘Calatrava’ y ‘Los Chivos’ fueron golpeadas por las autoridades esta semana, perdiendo a varios de sus cabecillas.
El operativo más importante se concentró en el municipio de Bello, donde la Policía aprovechó un descuido de los delincuentes y dentro de una casa apresó a tres presuntos jefes de la banda ‘Pachelly': alias ‘Alber’, ‘Lancha’ y ‘El Gordo’.
Una bodega para almacenar artículos de fantasía, ocultaba también dos inusuales armas de fuego provenientes de Estados Unidos.
El local está en un popular ‘San Andresito’, es decir, una edificación acondicionada con establecimientos comerciales, localizada en la calle 48 con la carrera 53 del centro de Medellín.
“Cada vez que ‘El Cebollero’ estornuda, aquí se arma un escándalo”, me dijo con ironía un investigador judicial, bebiendo un sorbo de tinto en las afueras del Palacio de Justicia de Medellín.
Es que desde el pasado 26 de agosto, cuando se hizo público que ese cabecilla de la organización criminal ‘La Oficina’ recibiría el beneficio de la detención domiciliaria, el caso ha estado hasta en boca del Presidente de la República. ¿Qué hay detrás del alboroto? ¿Y por qué varios procesos contra integrantes de esa organización se han complicado por problemas de salud?
Detención intracarcelaria como medida de aseguramiento, por el punible de concierto para delinquir agravado con fines de desplazamiento forzado, extorsión, tráfico de drogas y homicidio, fue la decisión del juzgado contra 17 presuntos integrantes de una estructura ilegal del nororiente de Medellín.
La Odin ‘San Pablo’ (Organización Delincuencial Integrada al Narcotráfico) fue esta vez la golpeada por las autoridades, que venían investigándola hacía más de un año.